Boutiques con glamour

Son las 10 de la mañana y el calor deslumbrante de otro día de verano mediterráneo le despierta de su sueño. Las sábanas de algodón blanco que envuelven su cuerpo se caen, mientras se estira, abre las persianas y mira hacia el reluciente puerto de Puerto Banús.

Cuando el promotor inmobiliario José Banús soñaba con crear un rival español para St. Tropez y Monte Carlo en los años sesenta, no podía imaginar que su joven promesa superaría a sus rivales franceses.

Ferraris, Lamborghinis y Bentleys cruzan sin prisa, amenizando la estancia de los clientes de las cafeterías mientras disfrutan de su café en el fresco relativo de la mañana. Los megayates se balancean con suavidad en aguas turquesas en sus amarres. Los extranjeros pasean, vestidos con ropa náutica de diseño, con una sonrisa relajada y un bronceado profundo que ilumina sus rostros mientras contemplan los escaparates de las boutiques de Louis Vuitton, Dolce & Gabbana, Bulgari, Gucci y Jimmy Choo, y disfrutan de otra bonita mañana en su hogar adoptivo.

Así es la vida en Puerto Banús. Los áticos o apartamentos con vistas al puerto o cerca del mismo son muy codiciados, ya que no solo ofrecen a los residentes entrever los estilos de vida de los ricos y famosos, sino también la oportunidad de poder formar parte de este club selecto. Aparentemente moderno pero firmemente arraigado en el estilo arquitectónico clásico andaluz, Banús es un pueblo portuario compacto de edificios encalados impecables, plazas agradables, bulevares amplios y playas protegidas, acentuadas por elegantes complejos de apartamentos, muchos bares, clubes de playa y clubes nocturnos y exquisitos establecimientos de cocina gourmet.

Atractivo de moda.. a lo Monte Carlo

Cuando el promotor inmobiliario José Banús soñaba con crear un rival español para St. Tropez y Monte Carlo en los años sesenta, no podía imaginar que su joven promesa superaría (al menos temporalmente) a sus rivales franceses. La sofisticación general de Banús puede haber disminuido un poco en los últimos años, pero su popularidad permanente reside en su ubicación, su clima, su accesibilidad, su infraestructura y su atractivo de moda, los cuales siguen teniendo una sólida relevancia en la actualidad.

Incluso si no puede permitirse un superdeportivo o un megayate, no puede darse el lujo de cenar en los mejores restaurantes todas las noches y no puede ir a los clubes de playa más lujosos de Europa todos los fines de semana, aún así Banús tiene mucho que ofrecer. Y, para aquellos que buscan una conexión más permanente, hay algunas viviendas destacadas que están bien ubicadas y son más asequibles de lo que han sido años atrás.

Actividades diurnas y placeres nocturnos

Entre noviembre y marzo, la mayor parte de la actividad diurna tendrá lugar en el puerto o en sus alrededores. Los aproximadamente 900 amarres para yates de diferentes tamaños están menos poblados en esta época del año, mientras que la pasarela portuaria (o «primera línea») es bastante más tranquila, si bien todavía está llena de veraneantes y vecinos que disfrutan de las vistas, las cafeterías, los bares, las boutiques y, la mayoría de las veces, de un buen clima. En otros lugares, las playas que rodean el puerto están prácticamente vacías, salvo los dueños de perros que aprovechan al máximo el espacio y unos cuantos fornidos turistas esparcidos sobre la arena.

En abril, sin embargo, surgen los primeros brotes de verano, inicialmente en forma de los miles de madrileños que bajan a la Costa del Sol para sus fiestas de Semana Santa, seguidos pronto por los veraneantes del norte de Europa que disfrutan del bello clima primaveral.

Los megayates se mecen suavemente en sus amarres de Puerto Banús.

Desde este momento hasta finales de septiembre, Banús está inundado de actividad. Las cafeterías étnicas, los restaurantes de comidas para llevar, los restaurantes en el extremo opuesto del complejo y los centros comerciales en el corazón de Puerto Banús atraen a gente de todo el mundo.

A lo largo de la primera línea de Puerto Banús, existe la posibilidad de tomar un café relajante, una copa de vino o sentarse en un lugar para observar a la gente, boutiques selectas y una diversa oferta de restaurantes, desde pizzas a precios asequibles hasta suntuosos platos de mariscos.

Al lado de Puerto Banús, al Oeste, se encuentran los clubes de playa, donde puede elegir entre: los dirigidos a turistas y clientes más ricos y conocidos por sus «fiestas de champán» y otras extravagancias y los más tradicionales chiringuitos españoles (restaurantes de playa). Al Este del puerto, predomina un ambiente de playa más familiar.

Vida nocturna legendaria

La vida nocturna de Puerto Banús es legendaria, por una buena razón. Ya sea que busque una cena romántica para dos junto al puerto, tomar algo con amigos en un elegante bar, un último refresco con la familia en un pub irlandés antes de ir a casa, o una noche loca con numerosos pubs y clubes... Banús tiene opciones para todos los gustos y edades. Para placeres más cultos, es mejor dirigirse a algún otro lugar en Marbella, o más allá a Sotogrande.

Guía de Puerto Banús - Unirse a un selecto club de high-rollers de Marbella.